Juan Carlos Lastiri
Desde hace algunos meses tal parece que
vivimos una época de conflictos mundiales. Hace no mucho estamos atónitos,como
sociedad, de la barbarie que ha demostrado el EI, Ejercito Islámico, al quemar
a un rehén y luego mostrar varias decapitaciones de rehenes de distintos
países. Observamos un avión comercial siendo blanco de una guerra entre Ucrania
y Rusia, con muchos civiles muertos. Hace unos días el Presidente de los EEUU,
Obama, pidió permiso a su congreso para declarar la guerra al EI ante la muerte
de una rehén americana. No debemos dejar de lado la situación del grupo
extremista BokoHaram en Nigeria, quien ha cometido actos terroristas y ha
participado en hechos recientes, junto al EI, como los sucedidos en Francia.
Tal parece que vivimos épocas turbulentas donde ningún país está exento de la
violencia. En nuestro país no vivimos fuera de estas situaciones; si bien,
hemos sufrido como sociedad la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa, y
hemos sido testigos de la atrocidad del crimen organizado en lugares como
Guerrero, Michoacán y Tamaulipas, tal parece que la batalla no está perdida.
Esta semana el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, ha hecho
hincapié en los avances que el Gobierno de la República, que encabeza el
Presidente Peña, generó en términos de seguridad.Al encabezar la reunión del
gabinete de seguridad federal con los gobernadores de Yucatán, Rolando Zapata;
de Chiapas, Manuel Velasco; de Campeche, Fernando Ortega Bernés; de Oaxaca,
Gabino Cué; de Quintana Roo, Roberto Borge, y de Tabasco, Arturo Núñez, el
encargado de la política interna y la seguridad aseveró que “nuestro país está en los mejores niveles de
seguridad de los últimos 10 años”.Al término del encuentro, en conferencia
de prensa, Osorio Chong argumentó que en términos brutos, en 2014 se
registraron 1 millón 500,000 delitos, cifra que sólo se había presentado en el
2007, con 20 millones de población menos que había.“Sin embargo, es solo un dato que nos permite ver que la estrategia está
funcionando, que tenemos que seguir adelante, que aquí no hay diferenciación de
los delitos del fuero federal con los de fuero común”.Osorio Chong afirmó
que por muchos años se persiguió a líderes de estos cárteles, y en el actual
gobierno, dijo, “en solo dos años dos
meses, llevamos detenidos a 88 de los grandes objetivos que a nivel
internacional y nacional (que) se les buscaba, de los 122 más buscados”.
Sin duda estamos trabajando en los focos rojos, que la misma sociedad detecta
pero, no se ha abandonado la labor y seguimiento para disminuir la incidencia
delictiva. Tal como lo señala Martín Espinoza, “México es un país que ha sido víctima de gobiernos primarios qué, no
han logrado disminuir tasas de delincuencia pero, sin duda la situación debe
tener un control para este año que inicia. Esto, sólo sobre la base de que se
tiene un control estricto del territorio que permita informar en tiempo real de
las acciones municipales. Hay varios “botones” de muestra que hacen pensar en
que la estrategia que ha tenido que ser corregida y reencauzada en los últimos
meses va “por buen camino”. Independientemente del deterioro social que se vive
en zonas muy específicas del país, la tasa de delitos totales por cada 100 mil
habitantes es la segunda más baja de los últimos 17 años (de 1997 a 2014)”.
Resulta alentador comprobar que los secuestros y las extorsiones se redujeron
en 2014 y, saber que tenemos una estrategia de largo plazo para atender los
delitos de alto impacto y para proteger a la sociedad de estos, lo que no había
sucedido en 14 años. El Gobierno de la República está trabajando en una tarea
vital de la sociedad, su seguridad. Sin embargo, debemos de ser conscientes que
a pesar de este esfuerzo, a lo menos llevará el mismo tiempo, en años, generar
condiciones de seguridad que el tiempo en que se gestaron las condiciones de
inseguridad. Pero sin duda, estamos avanzando según los indicadores nacionales.
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